Mensaje en la conmemoración del 39 aniversario de la masacre de El Mozote

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Hace 2 días estuvimos conmemorando el Día de los Derechos Humanos y en el marco de esa fecha, es preciso venir a El Mozote para honrar a las víctimas y unirse a quienes siguen buscando verdad, justicia y reparación. Son 39 años después de lo ocurrido y aunque hubo avances, mucho queda por hacer para que este caso y otros llegan a sentencia.

Este año ha sido muy particular y complejo por la pandemia de la COVID-19 y los fenómenos climáticos que hemos enfrentado que han causado gran impacto en todos nosotros, para el país y para el mundo. Parecía por un momento que otros temas no tienen la misma importancia. Pero esto no es así, porque no vivimos solo el momento. Como seres humanos, nos componemos de nuestro pasado que lleva a nuestro presente y éste prepara el futuro.

La verdad, justicia y la reparación de las víctimas no deben tener obstáculos y deben conseguirse, aunque pase el tiempo. La consolidación de la paz está incompleta si no se da respuesta a las víctimas, si no se les hace justicia y se destaca la verdad. De la experiencia de Alemania después de la segunda guerra mundial, puedo asegurar que mientras no se trabajen seriamente los procesos de verdad, justicia y reparación para las víctimas, éstas heridas siguen abiertas tres generaciones después y siguen causando demandas por reparación y justica. Casi 40 años después en El Salvador se sigue luchando.

Estamos por eso aquí con Ustedes de nuevo y hasta cuando sea necesario para expresar nuestra decisión de acompañar a las víctimas de esta masacre y de otras violaciones graves a los derechos humanos en su lucha.

La masacre del Mozote, calificada como una de las más crueles y brutales ocurridas en el siglo XX en América Latina, es uno de estos crímenes que no importa cuántas veces oigamos los testimonios o recordemos lo ocurrido, siempre nos sobrecoge y nos indigna, pero que también nos inspira poner todo el esfuerzo que podamos para evitar que vuelva a ocurrir.

Quiero volver hacer referencia a las recomendaciones del Relator especial sobre la promoción de la verdad, la reparación y las garantías de no repetición, Fabián Salvioli, en sus observaciones preliminares de su visita a El Salvador en mayo del año pasado, recomendó al Órgano Judicial  dar los recursos financieros y humanos necesarios, y las garantías de seguridad, para facilitar la labor efectiva de los tribunales que conocen los casos de violaciones de los derechos humanos cometidas en el conflicto armado, incluido el Tribunal de Instrucción de San Francisco Gotera.

Otra de sus recomendaciones fue, y cito: “Las Fuerzas Armadas deben garantizar el acceso efectivo al archivo militar del conflicto armado, según lo exijan la justicia, el gobierno o las víctimas”.

Respecto a la reparación de las víctimas agregó que se requiere el diseño e implementación de una política de reparación integral para las víctimas, en coherencia con las normas internacionales vigentes.

Me gustaría también agregar unas palabras sobre la memoria y garantías de no repetición. Considero que conservando la memoria sobre lo que ha pasado previene que vuelva ocurrir. Estamos aquí también para que esta memoria este viva.  

En la conmemoración del 25 aniversario de los Acuerdos de paz, en el 2017, NNUU hizo una consulta sobre los desafíos de la paz en el futuro, algunos de ustedes participaron en ese esfuerzo que denominamos “Voces de El Salvador” y uno de los principales hallazgos fue que la juventud no conocía o sabía muy poco sobre lo ocurrido durante la guerra. Para el “nunca más”, se requiere memoria de esta parte de la historia.  

El rol de las Naciones Unidas es prestar asistencia al estado y a la sociedad también en los temas de Justicia Transicional. Estamos muy cerca de completar un proyecto financiado por el Fondo para la Reconstrucción de la Paz para trabajar temas importantes de la justicia transicional, aportando a las instituciones que tienen un rol que jugar y a la sociedad civil comprometida para que finalmente podamos juntos abarcar esto temas tan importantes para un futuro mejor de nuestro hijos y nietos.   

Les agradezco las la oportunidad de estar nuevamente con ustedes en este homenaje a la dignidad de todas las víctimas.